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10 consejos para una cena navideña segura

Aunque las fiestas son ese momento del año en que nos reencontramos y compartimos en familia, esta vez se celebran con mascarillas, ventilación, distancia física y alcohol. No basta con una sola acción aislada, es la suma de las medidas lo que nos ayudará a que en 2021 contemos otra historia.

En cada Navidad, la familia de Andrea se reúne en la casa de su abuela para compartir la cena. Comen lengua de vaca a la vinagreta, pancito chip y kibbeh, y tiran fuegos artificiales. Cuando piensa en las fiestas, le vienen a la cabeza los abrazos a medianoche, el brindis con champán, los primos correteando por el jardín, las historias de infancia de los tíos, el traslado silencioso de los regalos a su lugar, el picoteo de distintos platos en la mesa navideña, los gritos, las risas y los cantos. Pero este año, gran parte de estos rituales no serán posibles.

El Ministerio de Salud viene expresando su preocupación sobre las fiestas hace ya varias semanas, dado que Paraguay está a punto de alcanzar los 100.000 positivos de covid-19. El lunes, el viceministro de Salud, Julio Borba, señaló que se podrían establecer medidas especiales para las fiestas de fin de año ante el aumento de casos. Las autoridades sanitarias anunciaron que se reunirían para decidir si volveremos o no a Fase Cero.

El director de Vigilancia Sanitaria, Guillermo Sequera, advirtió que si alguien se contagia ahora, probablemente no podrá acompañar la cena de Navidad con el resto de la familia. Festejar de forma responsable no es un capricho, sino una forma de minimizar las situaciones de exposición a la enfermedad para que nadie falte a la mesa la Nochebuena. Por eso, sistematizaron cuatro recomendaciones principales: moderar la frecuencia de salidas, limitar la cantidad de personas que acuden a un encuentro, minimizar el tiempo compartido y realizar el evento al aire libre.

Las autoridades recomiendan que pasemos estas fiestas solos con nuestra burbuja de convivientes. Si salimos de ese contexto estable, tenemos que tomar precauciones. Sin embargo, no es una única encrucijada ni un todo o nada. Existen muchas alternativas, pero tres son los factores decisivos en estos días de celebración: las personas con las que nos agrupemos, las condiciones del lugar y la forma en que disfrutemos de esa reunión. Cuantas más medidas de prevención se utilicen en simultáneo, menos serán los riesgos de contagio. Te traemos 10 consejos para que tengas una Navidad segura:

1- Reunirse con el círculo íntimo

Una de las recomendaciones más importantes estos últimos meses fue coincidir en el mismo espacio únicamente con nuestro núcleo o “burbuja”. Por eso, si nos encontraremos con gente de otro círculo, cabe preguntarse dónde, cómo y con quiénes. Según la analista médica Leana Wen, mezclar personas de distintos hogares, a esta altura de la pandemia, es de muy alto riesgo.

Wen explica en una entrevista que le hizo CNN que en este escenario el riesgo de contagio se reduce casi por completo, salvo que alguien del núcleo de convivencia haya estado expuesto días antes. Si el festejo se da entre personas de diferentes hogares, es importante permanecer en el mismo espacio el menor tiempo posible y mantenerse al menos a dos metros en todo momento (incluyendo a los niños). Está probado que esta distancia por un total acumulado de 15 minutos o más aumenta en gran medida el riesgo de enfermarse y exige cuarentena.

2- Uso obligatorio de tapabocas

De acuerdo con un artículo publicado en The New England Journal of Medicine, la evidencia relacionada con otros virus respiratorios indica que el enmascaramiento facial también puede proteger de la infección, al bloquear la entrada de partículas en la nariz y la boca. A los países que adoptaron la medida les fue mejor en términos de tasas de enfermedades graves relacionadas con covid y muerte, lo que en entornos con pruebas limitadas, sugiere un cambio de cuadros sintomáticos a asintomáticos.

El tapabocas es parte fundamental de las medidas recomendadas por la Organización Mundial de la Salud. Pero, cuando la gente se sirve comida y bebida, no usa mascarillas y las cenas navideñas no son breves. En conjunto, estos son algunos de los entornos de mayor riesgo de contagio del coronavirus. Aunque resulte engorroso, vale la pena insistir sobre su uso y, como expresó Sequera, si nos resulta más llevadera la situación, podemos innovar con mascarillas que tengan motivos navideños.

3- Generar encuentros al aire libre

Varios estudios demuestran cómo los comensales se van contagiando de acuerdo con su ubicación y el flujo del aire. La distancia y el tono de voz son determinantes a la hora de definir la velocidad con la que viajan las gotas de saliva, tanto en personas sintomáticas como en asintomáticas.

No es lo mismo estar sentado en silencio que hablar o gritar. Cuanto más se eleva la voz, uno impulsa con mayor velocidad las gotitas y viajan un poco más. Pero es muy difícil guardar silencio en un encuentro navideño. El uso de mascarilla y la distancia física, sumados a los encuentros al aire libre, reducen los riesgos de contagio.

4- Si necesitan reunirse en un espacio cerrado, cuarentena 14 días antes

Estas microgotitas que mencionamos pueden alejarse más si el espacio es abierto que si la familia se encierra en el comedor con aire acondicionado y todas las puertas cerradas. Ahí, esas partículas virales se quedan un mayor tiempo circulando, las personas las respiran y luego se depositan sobre los cubiertos y demás elementos de la mesa.

Si no queda alternativa y la única opción es encontrarse en un sitio cerrado, la única forma segura de hacerlo es que todos se hayan puesto en cuarentena 14 días previos a la Navidad. También es posible si fueron 10 días, aunque existe un riesgo mayor. En ese caso, en la fecha de la celebración, mantener puertas y ventanas abiertas, con familias sentadas separadas.

5- Ordenar la mesa en zigzag y no compartir cubiertos

La distribución de las personas en la mesa también es importante para evitar contagios. La opción ideal es sentarse en zigzag para no tener a otro comensal de frente. La experiencia en Europa demuestra que el contagio en los miembros mayores de la familia aumenta en fechas festivas, por esa razón deben estar más protegidos. De reunirse en espacios cerrados, pueden ubicarse junto a las ventanas.

La dinámica zigzag también ayuda a evitar el “picoteo” y el compartir los utensilios de la mesa, que son prácticas habituales entre miembros de la familia. Los platos, vasos y cubiertos deben ser de uso individual. Además, todos deben estar bien lavados y desinfectados con alcohol.

6- El alcohol como centro de la mesa

La costumbre de la desinfección es la que se ha intentado instalar desde el comienzo de la pandemia. Si nos reunimos con personas que no son de nuestra “burbuja”, esta puede ser, con más razón, una alternativa. Una opción es ubicar una botellita de alcohol en gel al lado de cada uno de los platos. Otra es tener una a mano para higienizarnos antes de tocar un elemento en la mesa. Lo de no compartir utensilios también se aplica al celular. Es lógico que queramos comunicarnos con quienes no pudieron asistir, pero debemos evitar que más de una persona esté en contacto con el mismo dispositivo. En ese caso, higienizarse antes y después de tocarlo.

7- Si una sola persona sirve la comida, mejor

En nuestra cultura, acostumbramos a compartir las tareas: la tía trae el lomito al champiñón, la abuela hace la papa a la crema, la prima pone el pavo agridulce, lo que suele servirse como un “banquete”. En estas circunstancias, cuantas menos manos compartan las pinzas con las que nos servimos las ensaladas, mejor. Se recomienda que una sola persona sirva la comida.

8- Nadie con síntomas o sospecha de covid puede reunirse

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) indicaron que la probabilidad de infección durante estas fiestas es muy alta, tanto para la población general como para quienes son médicamente vulnerables. Entre el listado de personas que no deben organizar ni asistir a reuniones festivas presenciales figuran:

• Las personas que tienen diagnóstico de covid-19 y no reúnen los criterios para estar en contacto con otras personas sin riesgo.
• Las personas con síntomas de covid-19.
• Las que esperan resultados de una prueba viral de detección.
• Las que pudieron haber tenido exposición a un caso positivo en los últimos 14 días.
• Las que corren mayor riesgo de enfermarse gravemente por el covid.

9- Moderar el consumo de alcohol

Es usual el consumo de alcohol en los festejos de Navidad y Año Nuevo. Pero este contexto nos pide toda nuestra atención y cuidado. Los CDC señalan que el consumo de alcohol y otras drogas puede afectar el criterio y dificultar la puesta en práctica de las medidas de seguridad contra el covid. Cuando uno bebe, se distiende, se relaja, se acerca y se desinhibe, y estos son los factores que favorecen a la diseminación de microgotitas.

10- El consejo más difícil: evitar el contacto físico

Por último, y no menos importante, debemos evitar todo lo posible el contacto físico. Muchos creen que si ya tuvimos covid “estamos salvados”. Pero aunque la reinfección del Sars-CoV-2 parecía rara al principio, cada vez —y luego de nueve meses de circulación en todo el mundo— se vuelve más frecuente. Hacerle frente a la pandemia implica conducir hacia abajo tanto las tasas de transmisión como la gravedad de la enfermedad.

La evidencia creciente sugiere que en toda la población la mascarilla facial podría beneficiar ambos componentes de la respuesta. Pero también suma complementarlo con todas las medidas que ya conocemos, lo que evitaría la segunda ola de contagios. Vale la pena recordar que aunque Paraguay se unió al mecanismo Covax, un recurso establecido por la Organización Panamericana de la Salud y la Alianza Internacional de Acceso a Vacunas (GAVI), las inyecciones todavía se encuentran en distintas etapas de desarrollo.

Un análisis del Centro de Innovación en Salud Global de la Universidad Duke, Estados Unidos, revela que un total de 9,8 mil millones de dosis ya están reservadas, incluso antes de que las vacunas candidatas sean aprobadas: las compras confirmadas cubren 7.100 millones de dosis, y otras 2.600 millones están actualmente en negociación.

El estudio revela que los países con ingresos altos concentran más de la mitad de las dosis compradas hasta ahora a nivel mundial. La mayoría de las naciones de América Latina tendrán un acceso limitado en los próximos meses. Nos queda seguir cuidándonos entre todos y ponernos creativos por el tiempo que dure la pandemia.