Las claves de una médica de Urgencias
El sentido de responsabilidad y la dedicación al cuidado son dos de las características principales para la atención de emergencias. La doctora Clarissa Da Costa, directora médica del Hospital Universitario San Lorenzo (HUSL) y coordinadora de la Unidad de Emergencias Médicas Adultos de IPS, nos habla de su carrera en esta apasionante área.
La doctora Clarissa Da Costa es emergentóloga, especialista en Medicina Legal y Ciencias Forenses, Administración Hospitalaria, Didáctica Universitaria y Educación Superior. Forma parte del Hospital Universitario San Lorenzo (HUSL) desde que acabó su residencia y especialidad y, en el ámbito público, es coordinadora de Residencia de Emergentología de IPS y de la unidad de Emergencias Médicas Adultos del Hospital Central de IPS.
El principal mandato al que están sujetos los emergentólogos es limitar la morbilidad de los pacientes que acuden con enfermedades y traumas inesperados. Los especialistas como la doctora Da Costa tienen la obligación de evaluar y manejar la situación de toda persona que requiera atención inmediata.
“En otros países del mundo, el médico que hace Urgencias es muy valorado por su poder de razonamiento crítico. El paciente llega y de nosotros depende que esa persona salga, que tenga un buen diagnóstico y un buen tratamiento”
Un sueño de infancia
Cuando en el jardín de infantes le preguntaron qué quería ser de grande, no dudó: médica. Al mirar atrás, le sorprende su temprano interés por la medicina porque no tenía una influencia directa en su círculo familiar que se dedicara a esto. Pero como en toda buena historia, el comienzo no fue fácil. La doctora Da Costa reconoce que le costó mucho arrancar sus estudios; después de tener que reiniciar tres veces la carrera por problemas económicos, logró culminar con éxito. Pero al momento de rendir el examen de Conarem se equivocó en el número de fila de uno de los bloques: «Inexplicablemente, igual quedó esa plaza para mí. Era mi destino».
Y de todas las ramas posibles, eligió la emergentología como norte. “Hay muchísimas especialidades, pero yo siempre fui de vivir al límite. Mi vida no fue nada fácil, siempre tuve algún tipo de presión y muchos obstáculos”, reflexiona.
“Lastimosamente, la emergentología no es tan conocida y valorada acá. En otros países del mundo, el médico que hace Urgencias es muy valorado por su poder de razonamiento crítico. El paciente llega y de nosotros depende que esa persona salga, que tenga un buen diagnóstico y un buen tratamiento. Su destino está en manos del emergentólogo. Es una responsabilidad inmensa”, elabora.
Clarissa Da Costa aprecia el camino empinado que le tocó recorrer para abrirse paso hasta la posición que construyó, al frente de equipos profesionales y multidisciplinarios. Reconoce que, como mujer, tampoco fue fácil que los demás reconocieran su mérito, pero nada la frenó: “Si nacimos para algo, si nos proponemos una meta, no existe poder más fuerte que ese deseo. Soñar es cumplir”.
Su profesión ya es parte de su estilo de vida y la adrenalina es uno de sus motores: “Imaginate lo que es vivir con nuestro sistema de salud, donde tenés pocos recursos. ¡Tenés que hacer magia!”. Y médicos como ella, realmente, la hacen.
La doctora Clarissa Da Costa es docente en la UCA, UPAP y UMAX, y también en el programa de subespecialidades de Conarem. Es directora de la carrera de Medicina en la UPAP y coordinadora de posgrado de la Residencia en Emergentología en IPS.
Es asesora y auditora de Urgencias de los sanatorios San Roque, La Costa, Santa Julia y San Lorenzo. Adicionalmente, es presidenta de la Sociedad Paraguaya de Emergencias Médicas, facilitadora permanente de BEC OMS/OPS y capacitadora de Código DEA del programa de prevención cardiovascular del MSPyBS.
Para dudas y consultas, la médica pone a disposición su cuenta de Instagram @claridacosta.
Sin Comentarios