Conspiraciones

Teorías que desafían nuestra comprensión de la realidad

El misterio nos atrae y hacemos un recuento muy entretenido en honor a Halloween. Con el reciente fallecimiento de un conocido político local, las mentes conspirativas se pusieron a teorizar sobre las posibles causas e, incluso, a poner en duda la misma muerte. Teorías como esa abundan en el mundo y en esta edición te contamos algunas de las más famosas para que saques tus propias conclusiones. 

Antes de iniciar este recuento, es importante esta aclaración: ninguna teoría está comprobada y las versiones oficiales de los hechos siguen tal cual. Las especulaciones son solo una fuente de entretenimiento para mucha gente, y se alimentan de nuestra curiosidad innata y nuestra inclinación natural por contar historias. Sin más preámbulo, comencemos. 

El accidente de Lady Di

Antes de que la pregunta “¿dónde estabas el 11 de setiembre?” se convirtiera en estándar, toda una generación se definía por dónde estaba cuando murió Lady Di.

Diana Spencer, Lady Di, princesa Diana… La mujer que llevó muchos títulos y dio la espalda a la monarquía más poderosa del mundo murió en un trágico accidente automovilístico en París, huyendo con Dodi Al-Fayed, su nueva pareja, de los flashes de los paparazzi. El suceso trascendió Reino Unido y conmocionó al mundo entero porque ella era querida en todas partes: era la princesa del pueblo. Así que, por supuesto, su fallecimiento no estuvo exento de controversias y, aunque dos años después las autoridades francesas concluyeron que su muerte fue accidental, los conspiranoicos tenían mucho que decir al respecto. 

Por un lado, Mohamed Al-Fayed, padre de la entonces pareja de la princesa de Gales, sostuvo, desde el principio, que fueron asesinados. Esta teoría no suena tan descabellada si tenemos en cuenta que la misma Diana llegó a temer por su vida: en 1996, un año antes del accidente, escribió una carta a su mayordomo expresando el temor de que su (entonces) esposo, príncipe Charles, estuviera planeando un accidente en auto a fin de tener vía libre para casarse con otra mujer. 

Por otro lado, algunos creen que su muerte fue arreglada por la industria de armamentos, ya que fue vocera de una campaña para eliminar el uso de minas terrestres (landmines) en zonas de guerra. El miedo de la princesa era real y no contaba con personal de seguridad propio; los guardaespaldas de su novio Dodi Al-Fayet extendían su “cuidado” hasta ella, pero no respondían a Diana. Otro dato cuestionado por los escépticos, especialmente aquellos a favor de la teoría del atentado, es que fue socorrida por médicos en el lugar y no la trasladaron a un hospital hasta varios minutos después, cuando ya no había nada que pudiera hacerse por ella. 

Lo que sucedió exactamente en aquel túnel parisino solo lo saben quienes estuvieron ahí, ya que no había dispositivos de video dentro; la única cámara de tránsito en el lugar se apagaba después de las 23.00. Las imágenes que conocemos no son del momento del accidente, sino de los resultados del choque. 

El suicidio de Kurt Cobain 

Todos estamos familiarizados con las circunstancias de la muerte de Kurt Cobain, conocido mundialmente como cantante de Nirvana y uno de los miembros del Club de los 27, como en la cultura pop se referencia a los artistas que murieron de manera trágica a los 27 años de edad. Los últimos tiempos de Kurt estuvieron marcados por el caos, el abuso de sustancias y su tumultuosa relación con la también artista Courtney Love. 

“Me ofreció 50.000 dólares por matar a Kurt Cobain. Cuando me ofreció el dinero, maldita sea, desearía haberlo tomado… pero sé quién lo mató”, palabras de Eldon Hoke en una entrevista concedida para un documental, donde este asegura que ella le pagaría por la cabeza del músico. Eldon The Duce Hoke era baterista y cantante de la banda The Mentors, y dos días después de la grabación para el documental, murió. 

Mucha gente no cree que la muerte de Cobain fuera un asesinato montado de manera tal que pareciera un suicidio. Aquellos que piensan de esta manera apuntan a Courtney Love como autora intelectual, pero existen distintas versiones de cómo lo hizo: algunos piensan que conspiró con la niñera de su bebé, otros que reclutó al mejor amigo de Kurt para ejecutarlo, pero la mayoría asegura que lo encargó a un profesional. 

La historia oficial, sin embargo, es que Kurt Cobain murió el 5 de abril de 1994 de una herida autoinfligida en la cabeza. Su cuerpo fue descubierto unos días después en su casa por un electricista que debía instalar equipo de seguridad en la propiedad. En el lugar había una nota, aparentemente de despedida, que apuntaba a suicidio.

Todo parece muy sencillo, de buenas a primeras, pero una vez que más datos sobre la escena fueron publicados, los fans empezaron a dudar y a especular sobre qué pudo haber sucedido, y la animosidad que muchos sentían por Courtney la convirtió en el blanco de las teorías por defecto. 

Jonestown

El 18 de noviembre de 1978, más de 900 personas consumieron cianuro bajo las órdenes de Jim Jones, líder del Templo del Pueblo. Sucedió en Jonestown, una sociedad idílica creada en medio de la selva de Guyana donde sus seguidores vivían comunalmente y llevaban una rutina más o menos agraria; criaban ganado y cultivaban la tierra para su subsistencia.

La descripción anterior puede hacer parecer que la vida en Jonestown era perfecta, pero, en la práctica, la secta de Jim Jones cometía todo tipo de abusos contra sus seguidores, sin importar edad ni género. Aquellos que intentaban huir eran capturados por la guardia personal de Jones y posteriormente torturados dentro del complejo. Después de un tiempo, la paranoia del líder llegó al extremo y anunció a los habitantes que habría personas que buscarían destruir su comunidad, y que la única manera de salvarse era cometiendo un acto de fe: suicidio en masa, juntos. Hacia el final, él empezó a practicar algo que llamaba “noches blancas” para probar la lealtad de su gente. En esas ocasiones se practicaban simulacros del suicidio masivo con el fin de detectar traidores o personas “sin fe”. 

Todo terminó de la manera más violenta y trágica posible, cuando los habitantes de Jonestown fueron obligados (algunos a punta de armas de fuego) a beber cianuro. Los que no accedieron de forma voluntaria fueron inyectados con el veneno o simplemente disparados en el lugar. El hecho sucedió luego de que Jim Jones ordenara el asesinato de una comitiva que llegó a Guyana desde Estados Unidos para investigar lo que sucedía en el sitio, especialmente las denuncias realizadas por parientes de seguidores, quienes aseguraban que sus hijos, hermanos, padres y/o parejas eran retenidos en contra de su voluntad y brutalizados cuando intentaban irse. En un acto de desesperación, Jim Jones dio su orden final y se llevó consigo la vida de más de 900 adultos y niños. Durante la investigación, el cuerpo de Jones fue encontrado sin vida con una herida de bala, aunque nadie puede decir con certeza si el disparo fue autoinfligido o no. 

Hasta el día de hoy, las circunstancias no están completamente claras y muchos dudan de la veracidad de la versión oficial. La teoría principal que los conspiranoicos manejan es que Jonestown era un lugar de experimentaciones ilegales financiadas por la CIA y, aunque parece descabellado, la idea se sustenta en la gran influencia que Jones poseía en la política de EE. UU. antes de asentarse en Guyana. Incluso, se cree que Jim era recluta de la CIA para un programa llamado MK Ultra, una serie de experimentos realizados (sí, de verdad) por esa institución con la droga conocida como LSD en un intento por conseguir el control sobre la mente de un individuo. Los más osados aseguran que el proyecto funcionó y que Jones puso en práctica su entrenamiento para controlar a sus seguidores. 

Y aunque el carisma de Jim Jones es legendario, es más que improbable que ese haya sido el caso. Algunos de los más sensatos simplemente piensan que este fingió su muerte, que el cuerpo hallado por los investigadores no era el suyo y que después de comandar a sus seguidores para que beban el cianuro, escapó y siguió viviendo en libertad. 

La desaparición de Amelia Earhart

Uno de los mayores misterios del siglo XX es, sin lugar a dudas, la desaparición de Amelia Earhart durante uno de los últimos tramos de vuelo que necesitaría para completar su ambicioso proyecto de dar la vuelta al mundo. Nació en 1897, en Kansas, y desapareció casi 40 años después, la noche del 2 de julio de 1937, en medio del océano Pacífico y sin dejar rastro alguno. 

Amelia siempre fue una chica inquieta y curiosa, o al menos así la describían quienes la conocieron. Después de ofrecerse para trabajar de enfermera durante la Primera Guerra Mundial, tenía un brillante futuro por delante, uno que quedó marcado definitivamente después de que subiera a su primer avión durante un vuelo de demostración en Los Ángeles. Al bajarse, supo que eso haría el resto de su vida. En 1923 obtuvo su licencia y cuatro años después era reconocida como una de las mejores pilotos de Estados Unidos, pero fue el año 1928 el que, probablemente, cambió su vida, pues recibió la oferta para convertirse en la primera mujer aviadora en cruzar el océano Atlántico. Ese viaje la convirtió en una celebridad y sentó las bases para que en 1935 comenzara a planear su vuelta alrededor del mundo. 

El 21 de mayo de 1937, a bordo de una nave Lockheed Electra, Amelia emprendió una ruta que la llevaría por Miami, Puerto Rico, Venezuela, África, Pakistán, Calcuta, Birmania, Bangkok y Singapur. De Indonesia partió para Australia y de ahí a Papúa Nueva Guinea, donde aterrizó el 29 de junio. En unas fotos de esa última parada, se la ve cansada, pero en sus comunicaciones nunca lo demostró. En la noche y madrugada del 2 de julio, despegó por última vez. Esa noche, 20 horas después de su partida, se recibieron comunicaciones desde el Electra en la que mencionaba el bajo combustible. Lo que sucedió con ella y su nave, nunca se supo. 

Las teorías arrancan en este punto. Una de las más fuertes es que Amelia Earhart y su tripulación volaron a territorio controlado por los japoneses donde fueron capturados y ella fue forzada a trabajar como una Rosa de Tokio, mujeres que grababan transmisiones en inglés para engañar a pilotos americanos. Otra idea que sigue una ruta similar es que Amelia, en realidad, estaba espiando a los japoneses bajo órdenes del Gobierno estadounidense y que su viaje fue una pantalla para desviar sospechas. Esta segunda línea mantiene que una vez que terminó la Segunda Guerra Mundial, Amelia regresó a casa para vivir con una nueva identidad y fuera del ojo público (aunque, supuestamente, fue reconocida años después). 

Sin embargo, la teoría más aceptada y famosa es que ella y su copiloto lograron aterrizar en una pequeña isla del Pacífico, casi 700 kilómetros al suroeste de la isla Howland, su destino original. Se dice que el Electra cayó en un arrecife de corales y que Amelia y su acompañante vivieron sus últimos días en ese pequeño pedazo de tierra. 

Hay muchos otros misterios y teorías por explorar, pero no nos alcanzarían las páginas para analizarlos en una sola edición. ¿Te gustaría leer una segunda parte? A nosotros, sí. Mientras tanto, queremos saber, ¿cuál de todas estas teorías suena menos descabellada?