Vicky Bedoya (@vickybedoyart) es una pintora reconocida por sus obras absurdas donde priman el humor y, especialmente, los animales.
Dos palabras que te definan: Multidisciplinaria y creativa.
Una película que te marcó: The Dreamers (2003), de Bernardo Bertolucci.
Tu comida favorita: La cocina asiática en general.
Tu destino nacional preferido: Algún arroyo o río, no importa donde sea.
Alguna fobia o miedo inusual: Le sigo teniendo miedo a la oscuridad.
¿Cuál es tu medio de expresión favorito?
El dibujo y la pintura. Desde chica que amo dibujar y pintar, es muy genial poder dedicarme a lo que siempre me apasionó. Sé hacer de todo, pero honestamente siempre elijo la pintura como medio de expresión antes que otra cosa.
Pertenecés a una nueva camada de jóvenes artistas. ¿Sentís alguna responsabilidad o desafío en ese contexto?
Para mí se siente más como “la responsabilidad del desafío”. Trato de ser lo más auténtica posible. Considero que uno elige el arte como medio de expresión de lo que le atraviesa o interesa. Yo elijo el humor como narrativa, me representa.
Se podría decir que tu estilo es satírico y un poco absurdo. ¿Por qué elegiste ese camino? ¿Fue algo consciente o se dio orgánicamente?
Honestamente, tengo muchas influencias respecto al humor, sobre todo familiares. Hay un artista alemán que se llama Michael Sowa, que le gustaba mucho a mi abuelo (también era pintor) y a mi papá. De chica me pasaba horas viendo sus obras llenas de sátira y animales en situaciones retorcidas. Creo que eso me marcó bastante.
Si tuvieras una máquina del tiempo, ¿cuándo y dónde te gustaría ir?
¡Qué pregunta más difícil! Seguro me iría a mi infancia, cuando vivía en Suiza. Mi niñez fue genial. O si no, creo que viajaría a los 70.
Si pudieras compartir un vinito con cualquier persona, viva o no, ¿quién sería?
Lo tomaría con Michael Sowa, pero con alguien para traducir, por favor [risas].
¿En qué momento te tomás una pausa?
Al final del día o los fines de semana, siempre en mi taller.
Sin Comentarios